El girasol arranca con fuerza y el trigo consolida un escenario excepcional en el inicio de la campaña 2025/26

La campaña agrícola 2025/26 comenzó con señales alentadoras. El último relevamiento de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) muestra un panorama nacional sólido, donde los perfiles hídricos, la distribución de siembras y la sanidad de los cultivos convergen para sostener buenas expectativas.

Las primeras implantaciones se concentran en el NEA y el centro-norte de Santa Fe ya que este año -a diferencia de los anteriores- las reservas de humedad en el perfil son óptimas. Esto permitirá no solo recuperar superficie resignada en el pasado, sino también asegurar que la siembra se realice en la ventana ideal.

Este contexto resulta clave para maximizar el potencial de rinde. En campañas anteriores, el girasol había visto este potencial comprometido por la falta de agua o por la competencia con otros cultivos de verano."

El trigo mira al cielo con altas expectativas

El cereal alcanzó el cierre de su siembra con una superficie nacional de 6,7 millones de hectáreas. Aunque algunos lotes en Necochea, Azul y Daireaux aún no han sido implantados, estas áreas no modificarán la estimación final.

Las condiciones son excepcionales: el 81,9 % de los lotes presenta humedad adecuada a óptima y el 99 % se ubica entre normal y excelente. En el norte, el 38,2 % del cultivo ya transita desde encañazón en adelante y en el centro y sur, la totalidad de la superficie permanece en estado vegetativo.

Este escenario contrasta con los últimos cuatro inviernos, donde la sequía había reducido el potencial productivo. Las lluvias de otoño y la estabilidad hídrica del invierno fueron determinantes para revertir esta tendencia negativa.

La visión de la región núcleo: un trigo que emociona

La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) describe una situación inédita para la región núcleo, donde el 90 % de los lotes se encuentra entre muy buenos y excelentes. Técnicos y productores usan adjetivos como “impresionante” y “muy, pero muy bueno” para describir los trigos implantados.

Los técnicos de la BCR anticipan que agosto podría presentar un patrón más seco y frío. Esto ayudaría a reducir la presión de enfermedades, siempre que no se registren heladas intensas que afecten el cultivo.

Cebada: avances firmes y primeras alertas sanitarias

La cebada está a punto de completar su siembra, con un avance del 98 % de la superficie estimada. Solo restan algunos lotes en el sur del área agrícola.

En el sudeste y sudoeste bonaerense, el 30 % de los cultivos ya está en macollaje. Toda la superficie implantada presenta condición de normal a buena, gracias a una adecuada disponibilidad hídrica en la siembra.

No obstante, los técnicos detectaron los primeros síntomas de enfermedades foliares. Esto obliga a reforzar los controles para evitar mermas en el rinde, especialmente en una etapa de desarrollo clave para el cultivo.

Maíz: la cosecha se encamina al cierre

El maíz con destino a grano alcanzó un 89,3 % de avance en la cosecha, tras progresar 1,3 puntos porcentuales en la última semana. El rinde promedio nacional es de 72,3 quintales por hectárea.

En el norte y centro del área agrícola, la campaña está casi finalizada. Los resultados fueron desiguales: algunas zonas rindieron por debajo de lo esperado, mientras que en el sur de Santiago del Estero se registraron resultados por encima de las proyecciones iniciales.

En el sur del área agrícola todavía queda un 25 % de la superficie por cosechar. Los productores esperan que los lotes alcancen la humedad óptima antes de entrar con las máquinas.

Allí, los rindes rondan los 70 quintales por hectárea. La BCBA mantiene su proyección de producción en 49 millones de toneladas.

Perspectivas climáticas

Los pronósticos indican que agosto será, en gran parte de la región pampeana, un mes frío y con lluvias acotadas. Este patrón podría ser favorable para reducir la presión de enfermedades, aunque también implicará el riesgo de heladas tardías.

En zonas con excesos hídricos, como el sudeste bonaerense, se espera que la menor frecuencia de lluvias ayude a equilibrar el perfil. Sin embargo, los técnicos recomiendan continuar con un seguimiento riguroso para evitar problemas sanitarios.

¿Qué dicen los especialistas?

Para los técnicos, este inicio de campaña es el resultado de una combinación de lluvias estratégicas, manejo ajustado y decisiones de siembra en fechas óptimas. La experiencia indica que cualquier cambio abrupto en las variables climáticas puede modificar el escenario en pocas semanas.

Un trigo con altos rindes y buena calidad podría mejorar la competitividad de Argentina en los mercados internacionales. El girasol, por su parte, tiene la oportunidad de capitalizar los precios firmes de los aceites vegetales en el mercado global.