Incendios forestales enormes arrasan Roraima, en el norte del Amazonas
El estado de Roraima está ubicado al norte de la cuenca del Amazonas. Sus bosques tropicales están sufriendo incendios incontrolables de cientos de kilómetros cuadrados. La gran mayoría son generados por el ser humano.
Roraima, uno de los estados más septentrional de Brasil es Roraima, tiene un clima húmedo que favorece el desarrollo de la selva tropical y suprime la aparición natural de incendios forestales, incluso durante la estación seca. Su ciudad mas importante es Boa Vista, y el estado es cruzado por el río Branco que forma parte de la cuenta del Amazonas. El Branco confluye con el río Negro al sur de Roraima, y este último vuelca sus aguas en el Amazonas más hacia el este.
No obstante, los científicos especializados en sensores remotos llevan observando incendios en esta región del norte de la Amazonia desde que se dispone de observaciones por satélite, especialmente durante los meses más secos de octubre a marzo. La mayoría son incendios de gestión, encendidos con fines como la quema de pastos y zonas agrícolas o la tala de la selva tropical. Sobre este punto Earth Observatory ha dado a conocer un detallado informe.
En la segunda quincena de febrero de 2024, los satélites de la NASA observaron una actividad de incendios inusualmente extendida e intensa en Roraima, según múltiples plataformas de vigilancia de incendios, incluido el Tablero de Incendios de la Amazonia SERVIR, el programa Queimadas de la Agencia Espacial Brasileña y el Sistema de Información de Incendios para la Gestión de Recursos (FIRMS) de la NASA.
La mayoría son iniciados por la actividad humana
En consecuencia, se puede afirmar que la mayor parte de estos incendios son iniciados por el ser humano. En varias ocasiones, los satélites observaron espesas columnas de humo que cubrían gran parte de Roraima. En las últimas décadas, los paisajes boscosos de este estado en rápida transformación se han visto cada vez más fragmentados por nuevas carreteras, pastos y tierras de cultivo a medida que se han ido expandiendo ciudades como Boa Vista, Caracaraí y Rorainópolis.
La imagen inicial de esta nota, adquirida por el MODIS (Moderate Resolution Imaging Spectroradiometer) del satélite Terra de la NASA, muestra el humo procedente de varios incendios al sudoeste de Boa Vista el 22 de febrero de 2024. La imagen en falso color de arriba de este párrafo, fue captada por el OLI-2 (Operational Land Imager-2) del satélite Landsat 9, y muestra la cicatriz creada por un gran incendio cerca de Boa Vista el 23 de febrero de 2024.
Según datos del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales de Brasil, el MODIS del satélite Aqua de la NASA detectó más de 2.057 incendios activos en Roraima en febrero de 2024. Esa cifra es cinco veces superior a la media de febrero y muy por encima del récord anterior de 1.347 de febrero de 2007. La intensidad y el tamaño de muchos de los incendios también son inusuales.
Enormes cantidades de gases de efecto invernadero a la atmósfera
El Servicio Copernnicus de Vigilancia de la Atmósfera (CAMS) de la Comisión Europea, un sistema basado en las observaciones MODIS del Sistema Mundial de Asimilación de Incendios (GFAS), calculó que los incendios de Brasil liberaron más de 4,1 megatoneladas de carbono a la atmósfera en febrero, la cifra más alta registrada en un mes desde 2003. Aproximadamente la mitad de esas emisiones de carbono procedieron de los incendios de Roraima.
Brazils northernmost state of Roraima is experiencing a spike in wildfires. The fires are threatening local communities and improvements in deforestation. #Brazil #Amazon #deforestation #indigenous #wildfire #cgtnamerica pic.twitter.com/Cn7UwDHjEh
— CGTN America (@cgtnamerica) March 2, 2024
De hecho, hace algunos días en Meteored Argentina habíamos dado cuenta sobre este punto al informar que casi 3000 focos de incendio en la amazonia brasileña en febrero establecieron este nuevo récord. "La mayoría de los incendios de gestión que se pueden encontrar en esta zona durante un año normal cubrirían sólo unos pocos kilómetros cuadrados, pero este año estamos viendo incendios que comenzaron en pastizales o en selvas recientemente desbrozadas y luego se extendieron a las zonas de selva circundantes que están quemando cientos de kilómetros cuadrados", eso dijo Shane Coffield, del Centro Goddard de Vuelos Espaciales de la NASA.
Lo cierto es que estos incendios forestales son enormes y devastadores para los ecosistemas y la calidad del aire. También inyectan grandes cantidades de gases de efecto invernadero a la atmósfera. Para tener un valor de referencia, la superficie de la ciudad de Buenos Aires s de 203 kilómetros cuadrados, y aqui estamos ante varios cientos de kilómetros cuadrados. Los incendios forestales en esta zona arden en el sotobosque de la selva tropical sin consumir totalmente las copas, pero pueden dañar las selvas tropicales matando un gran porcentaje de árboles y causando daños que persisten durante décadas.