Olas dormidas, el fenómeno mortal que acecha en algunas playas

Las olas singulares son fenómenos peligrosos porque en un contexto de olas importantes, siempre hay algunas que destacan de forma especial por su tamaño y energía. El otro día una de estas olas causó momentos de angustia en una playa de Rio de Janeiro.

Algunas de estas olas pueden ser mortales al arrastrar a las personas hacia el mar, donde las temperaturas son muy bajas o la agitación marítima impide volver a tierra.

Sneaker waves: olas singulares o dormidas

Son olas que arremeten tierra adentro ya sea en una playa o acantilado, con más fuerza de lo que inicialmente sería de esperar. Estas olas pueden fácilmente tomarte desprevenido puesto que vienen de forma repentina, tras un período de olas mucho más pequeñas. Visualmente, no dan señales de que vayan a ser tan violentas, ya que gran parte de su energía está escondida a la vista.

Las olas son el resultado de una transferencia de energía entre el viento y el mar. Los vientos de gran recorrido marítimo, que soplan de forma continuada en el tiempo, son los que provocan las olas de mayor tamaño. A una intensidad y dirección constantes, las olas serán más grandes a mayor velocidad del viento.

Peligros asociados

Las olas dormidas implican tres peligros principales que deben tenerse en cuenta.

• Hipotermia. En playas de aguas frías, la inmersión en el agua puede producir hipotermia y parálisis de las extremidades en apenas unos minutos.
• Agotamiento. Si una ola singular te arrastra mar adentro, las corrientes de resaca o nuevas olas pueden impedirte volver a la orilla. Luchar contra la corriente puede resultar en agotamiento y combinarse con hipotermia, produciendo una rápida muerte por ahogamiento.
• Desplazamiento de objetos. La fuerza del agua puede arrastrar grandes objetos como troncos o ramas. El simple peso de la arena combinada con el agua ha sido descrito como estar sepultado bajo hormigón, según personas que se han visto en una situación similar.

Medidas de seguridad

Es importante consultar las previsiones meteorológicas, las recomendaciones de los socorristas y las señales de advertencia que pueda haber instaladas. Hay que posicionarse siempre de frente al mar y estar pendiente en todo momento de los cambios en el viento y oleaje. Es recomendable situarse a una distancia prudencial de la orilla, que puede llegar a ser de centenares de metros cuando hay temporal marítimo.

Estas medidas de seguridad deben redoblarse especialmente en playas de surf o en entornos desconocidos. Ninguna parte de la playa está totalmente protegida de la entrada de una ola singular.

Los acantilados y espigones son igualmente peligrosos. Observa donde el suelo está mojado de olas previas, nunca des la espalda al mar y ten siempre en cuenta que las olas singulares pueden triplicar la distancia que alcanzan las demás olas.

Una de las playas más peligrosas del mundo

La playa de Reynisfjara está situada al sur de Islandia, y el baño en esta playa está prohibido y algunos tramos incluso han sido cerrados al público. Es mundialmente conocida por su arena de color negro y por albergar olas singulares y corrientes marinas particularmente peligrosas.

En esta playa, multitud de turistas han sido arrastrados mar adentro cogidos de imprevisto por poderosas olas, traicioneras y repentinas. Las fuertes corrientes y las aguas frías, convierten un simple paseo por la arena en una actividad de alto riesgo. El último incidente fatal, ocurrió en 2021, cuando una turista de nacionalidad China, fue arrastrada mar adentro y murió ahogada.