Tipos de granizo: sus distintas formas y origen

Este fenómeno meteorológico que nos asombra y, en ocasiones, nos causa estragos monumentales, pueden tener distinta apariencia según el tipo de nube de tormenta. Desde pequeñas piedras de hielo, hasta esferas enormes de más de 10 centímetros de diámetro.

El daño que puede llegar a provocar la caída de granizo en una región depende del tipo de granizo (tamaño, forma, consistencia, cantidad), también de su tasa de caída y de la zona que lo recibe, no serán iguales los daños generados sobre una metrópolis que sobre una ruta principal o un cultivo.

A continuación, exploraremos los distintos tipos de granizo, su formación, apariencia, y los misteriosos anillos en su interior que nos hablan de su historia dentro de la nube convectiva.

Qué es el granizo

El granizo es un tipo de precipitación sólida, un fenómeno meteorológico que se manifiesta en forma de piedras de hielo que caen desde las nubes durante una tormenta. Estas piedras pueden caer solas (granizo en seco), o en compañía de lluvias torrenciales.

No todas las nubes de tormenta tienen potencialidad para dejar caída de granizo, pero sí toda piedra de granizo se formó dentro de una nube de tormenta, o sea una nube convectiva.

Todo cristal de hielo que se precipita desde la base de una nube con un diámetro mayor a los 5 milímetros se considera granizo, estos pueden crecer dentro de la nube hasta los 15 centímetros, o más, y pesar más de medio kilogramo.

Cómo se forma el granizo

El granizo crece dentro de grandes nubes convectivas de tormenta como los cumulonimbus, de gran desarrollo vertical. En ocasiones, estas nubes logran una altura (tope de nube) de hasta 15 kilómetros, perforando la tropopausa con una protuberancia en el tope llamada “overshooting”. Estas nubes se pueden identificar a simple vista por su parte superior en forma de yunque con presencia de poderosa actividad eléctrica.

Dentro de estas nubes generadoras de granizo, la característica que no puede faltar son las fuertes corrientes de aire, ascendente y descendente, que son las encargadas de mover las gotas de agua sobreenfriada desde la base hasta el tope de la nube una y otra vez, de arriba hacia abajo.

A medida que la piedra comienza a colectar partículas de hielo y gotas en choques dentro de la nube, va aumentando su diámetro y peso, ya sea por el congelamiento de gotas de agua sobreenfriada, y/o por sublimación directa del vapor de agua sobre su superficie del granizo.

Tipos de granizo

Existen diferentes tipos de granizo según su formación y consecuencias:

• Granizo pequeño: son las esferas de hielo más comunes y su tamaño varía desde unos 5 milímetros hasta alrededor de 2 centímetros de diámetro. Estas pequeñas piedras de hielo pueden caer en grandes cantidades durante una tormenta.

En este caso, generalmente no provocan daños por el impacto al caer, sino que una vez en el suelo pueden fundirse parcialmente y unirse a otros pequeños granizos conformando grandes bloques de hielo; de esta forma obstruyen el sistema de alcantarillado sin dejar que la lluvia caída en esa misma tormenta drene correctamente, provocando anegamientos, o dejando un suelo intransitable plagado de bloques de hielo flotante.

• Granizo medio: con un diámetro de 2 a 5 centímetros, estas piedras de hielo son más grandes y pueden causar daños a cultivos y vehículos, también a animales y personas que se encuentren inadvertidas a la intemperie. Suelen ocurrir durante el desarrollo de tormentas fuertes a severas.

• Granizo grande y/o destructivo: en este caso las piedras de granizo son grandes a enormes, tienen un diámetro superior a 5 centímetros (y en ocasiones superar los 10 centímetros o más). Pueden romper vidrios, destruir completamente cultivos, dañar techos y causar lesiones muy graves a las personas.

Son generados en nubes de tipo superceldas, las cuales mantienen una vigorosa corriente de aire ascendente en el interior, que le permite a la piedra vencer la fuerza de la gravedad y mantenerse dentro de la nube por un largo tiempo. Esa ascendente, que puede llegar a velocidades de hasta 100 km/h, impulsa el granizo nuevamente hacia el tope de la nube y le permite seguir creciendo dentro de ella, hasta que finalmente cae hacia el suelo atraída por la gravedad, con una masa y diámetro destacados.

• Granizo irregular: en ocasiones, el granizo no tiene una forma perfectamente lisa y redondeada, puede ser cónico, alargado o con protuberancias. Los granizos que presentan aristas son doblemente peligrosos.

• Granizo múltiple: a veces ocurre que varias piedras de granizo se fusionan en una sola dentro de la nube antes de la caída. Estas masas de hielo pueden ser enormes, muy irregulares y causar daños significativos y destructivos.

• Granizo con capas alternas: si cortamos una piedra de granizo por la mitad, veremos en el interior capas, unas más blancas y otras más cristalinas, concéntricas y alternas, similares a los anillos de los árboles. Estas capas se forman mientras el granizo viaja desde la parte superior a la parte inferior de la nube muchas veces, mientras se va formando y creciendo en diámetro.

Los anillos del granizo nos cuentan su historia

Los anillos de hielo se forman mientras el granizo viaja desde la parte superior a la parte inferior de la nube de tormenta. Las piedras de granizo descienden a zonas húmedas de la nube recogiendo gotas de agua que se congelan, y luego el granizo sube a las zonas superiores de la nube con temperaturas bajo cero.

Las capas blancas y opacas de granizo contienen pequeñas burbujas de aire que le dan ese aspecto. Mientras que la capa más transparente y cristalina indica que ese granizo ha estado expuesto a más ciclos de fusión y congelación antes de caer al suelo, y ya ha perdido las burbujas de aire encapsulado en su interior.

Los anillos en el tronco de un árbol hablan de la edad del mismo y sobre todo del clima que ha tenido que sobrellevar. En paleoclima, el estudio de los anillos de los árboles nos da información muy valiosa para el estudio del cambio climático; mientras que los anillos del granizo nos permiten conocer el viaje y camino recorrido por el mismo dentro de la nube y así comprender mejor su formación.