Dónde acecha la historia: las cinco leyendas más aterradoras de Charleston

Charleston es una ciudad construida sobre historias: algunas escritas en los libros de historia, otras susurradas en la oscuridad. Cada farol parpadeante y cada roble cubierto de musgo parecen ocultar un espíritu inquieto, esperando recordar a los visitantes que el pasado aquí está lejos de estar olvidado.

fantasma
Charleston es una ciudad construida sobre historias, algunas triunfales, otras trágicas. Sus profundas raíces en la historia estadounidense la han convertido en un museo viviente de día y en un paraíso para lo paranormal de noche.

Con sus calles adoquinadas, robles cubiertos de musgo y mansiones centenarias, Charleston, Carolina del Sur, es una ciudad que lleva su historia con orgullo (y a veces de manera inquietante).

Tras el encanto y la hospitalidad sureña se esconde un lado más oscuro, donde los susurros del pasado resuenan en estrechos callejones y patios iluminados por velas. Desde el espíritu de un soldado confederado sin piernas hasta la misteriosa Dama de Blanco, aquí te presentamos cinco de los lugares más embrujados de Charleston, donde la historia y lo sobrenatural aún caminan de la mano.

1. El soldado confederado sin piernas

Erigida con gracia en el límite del Jardín White Point, la majestuosa casa del número 20 de South Battery es, sin duda, el símbolo de la grandeza de Charleston. Pero tras su elegante fachada, las leyendas hablan de un espíritu inquieto que se niega a marcharse.

Según la tradición local, el fantasma de un soldado confederado que perdió las piernas en combate ronda los pisos superiores de la casa. Los huéspedes han reportado sonidos de alguien arrastrándose por el pasillo, como si alguien se arrastrara en busca de lo perdido hace mucho tiempo.

Otros describen corrientes de aire gélido que aparecen de la nada y luces parpadeantes en habitaciones vacías. Algunos incluso afirman que se ha visto la aparición del soldado mirando por la ventana hacia el puerto, aún vigilando una ciudad que juró proteger.

2. Dock Street Theatre: la dama de rojo espera su final

Pocos lugares en Charleston combinan arte y misterio como el Teatro Dock Street, uno de los teatros más antiguos de Estados Unidos. Construido en 1736 y reconstruido varias veces desde entonces, ha entretenido a generaciones con obras de teatro, conciertos y cuentos de fantasmas.

El más famoso de sus espíritus es Nettie Dickerson , una mujer de bajos recursos que anhelaba riqueza y estatus. Una noche de tormenta, se encontraba en el balcón con su vestido carmesí, solo para ser alcanzada por un rayo.

Hoy en día, actores y tramoyistas afirman que la "Dama de Rojo" aún deambula por el teatro, apareciendo en los espejos o observando en silencio desde el balcón donde encontró su trágico final. Los invitados también informan que el fantasma de Junius Brutus Booth, padre del infame John Wilkes Booth, ronda tras bambalinas, quizás esperando una última ovación.

3. La antigua ciudadela: sombras del pasado en marcha

The Old Citadel, que hoy alberga un elegante hotel, alguna vez sirvió como academia militar y luego como hospital de la Guerra Civil, una combinación que casi garantiza dejar almas inquietas.

Los huéspedes y el personal suelen describir haber oído pasos marchando en formación , toques de corneta fantasmales y puertas que se abren o cierran solas. En algunas habitaciones, se percibe un leve olor a pólvora en el aire.

Quienes pernoctan a veces cuentan haber visto soldados fantasmales patrullando los pasillos con sus uniformes de gala, con rostros inexpresivos pero cumpliendo su deber inquebrantables. El pasado de la Ciudadela como bastión de jóvenes cadetes y soldados heridos la convierte en uno de los monumentos más solemnes y embrujados de Charleston.

4. Orfanato de Charleston: ecos de niños olvidados

Construido en la década de 1790 como el primer orfanato público de Estados Unidos, el Orfanato de Charleston fue en su día un símbolo de esperanza para los niños abandonados y pobres. Pero sus muros también fueron testigos de un inmenso dolor: enfermedades, pérdidas y añoranza. Aunque el edificio fue demolido en la década de 1950, los residentes afirman que los espíritus de los niños nunca abandonaron el lugar.

Los visitantes que pasan por allí en noches tranquilas han reportado el sonido distante de risas infantiles y canciones infantiles, que resuenan débilmente en el aire. Algunos afirman sentir un tirón en la ropa o ver sombras fugaces pasar. Si bien el sitio hoy en día guarda poca semejanza con su pasado, quienes conocen la historia embrujada de Charleston creen que las almas de sus residentes más jóvenes aún se reúnen aquí, esperando eternamente un hogar.

5. Poogan's Porch: el lugar más encantador de Charleston

Si los fantasmas de Charleston tuvieran un lugar favorito para cenar, probablemente sería Poogan's Porch, un apreciado restaurante de Queen Street, conocido tanto por sus galletas como por sus fantasmales comensales. La casa fue originalmente una residencia privada, y su habitante más famoso era Poogan, un perro amigable del vecindario que disfrutaba saludando a las visitas desde la entrada.

Tras su fallecimiento, se dice que el espíritu de Poogan nunca se fue. Los comensales han sentido el roce de su pelaje en las piernas o han visto a un perrito durmiendo la siesta cerca del porche. Pero hay otra presencia, aún más misteriosa, aquí: Zoe St. Amand, una exmaestra de escuela que vivió en la casa a principios del siglo XX.

Tanto clientes como personal han visto su figura fantasmal asomándose por las ventanas del piso superior o deambulando por el comedor, vestida con ropa antigua. Algunos incluso la oyen pasearse por encima del techo después del cierre, como si se asegurara de que todo estuviera tal como lo dejó.

Referencias de noticias:

8 of the most haunted sites in Charleston. October 1, 2025. Kinsey Gidick