Video: el puente Hongqi en Shuangjiangkou (China) colapsa repentinamente

El derrumbe ocurrió pocas horas después de detectarse grietas en la estructura, sin dejar víctimas, y reavivó el debate sobre los riesgos geológicos en las zonas montañosas del suroeste chino.
Una nube espesa de polvo cubrió el valle de Shuangjiangkou cuando un tramo del puente Hongqi se desplomó sin aviso previo. El colapso, ocurrido el martes en la provincia china de Sichuán, dejó atónitos a los vecinos y a las autoridades, que apenas un día antes habían ordenado cerrar el tránsito por precaución.
La estructura, inaugurada en abril de este año, era considerada un símbolo del desarrollo regional y una de las obras más importantes de la ruta nacional G317. Su caída repentina generó un fuerte impacto porque se trataba de una construcción reciente, diseñada para resistir las duras condiciones del terreno montañoso.
Según las autoridades locales, el colapso se debió a un deslizamiento de tierra provocado por la saturación del suelo tras semanas de lluvias intensas. El movimiento d<e la ladera arrastró la base de uno de los accesos principales, lo que provocó que la estructura se partiera y terminara cayendo sobre el cauce del río.
El cierre del tránsito antes del siniestro fue decisivo para evitar una tragedia. Los ingenieros a cargo de la supervisión habían detectado grietas de hasta diez centímetros en la calzada y desplazamientos en la montaña, señales que anticipaban el riesgo inminente.

Los videos grabados por residentes locales muestran cómo la parte oriental del puente se desploma en cuestión de segundos. El sonido metálico del derrumbe retumba en las montañas mientras una nube gris envuelve el valle, dejando al descubierto la magnitud del desastre.
Geología compleja y lluvias por encima de lo normal
Geólogos del Instituto de Sismología de Chengdu explicaron que el terreno de la zona presenta una estructura muy frágil. La combinación de lluvias persistentes, pendientes pronunciadas y suelos fracturados genera condiciones propicias para deslizamientos repentinos.
El Ministerio de Transporte anunció una investigación para determinar responsabilidades y evaluar si hubo fallas en los estudios geotécnicos previos. También se analizará si los drenajes y sistemas de control de humedad funcionaron correctamente durante las semanas de lluvia intensa.
El impacto económico del derrumbe será considerable. La ruta G317 es una de las principales vías de conexión entre el este de Sichuán y el oeste del país, y su cierre obliga a realizar desvíos de más de 100 kilómetros por caminos alternativos.
#Colapsa: el Puente #Hongqi en Maerkang, provincia de Sichuan, #China,
— ESPECIGEST (@ESPECIGEST) November 11, 2025
#11Noviembre,2025
️Después de un deslizamiento de tierra de gran magnitud.
️Las autoridades habían cerrado el paso un día antes al detectar grietas en la estructura, evitando así cualquier pic.twitter.com/eiuJWrdEFN
Los transportistas y empresas logísticas advierten que estos desvíos incrementarán los costos y afectarán el suministro de materiales hacia la zona de la represa hidroeléctrica. Mientras tanto, las autoridades mantienen la zona acordonada y realizan estudios para determinar si el puente podrá ser reconstruido en el mismo lugar.
Un recordatorio sobre los límites del progreso
El siniestro reabrió el debate sobre la planificación de infraestructura en áreas de riesgo geológico. En regiones como Sichuán, donde la topografía es abrupta y la actividad sísmica frecuente, los especialistas sostienen que los controles deben ser permanentes y los sistemas de monitoreo, más sofisticados.

Aunque el país cuenta con una de las redes de sensores sísmicos más avanzadas del mundo, su cobertura no siempre alcanza las zonas rurales. El caso del Hongqi demuestra que incluso una obra moderna puede fallar si no se mantiene una vigilancia constante sobre la estabilidad del terreno.
El colapso también tuvo un fuerte impacto simbólico. China suele presentar sus grandes proyectos de infraestructura como emblemas de progreso y capacidad tecnológica, por lo que este accidente generó una amplia discusión pública sobre la relación entre velocidad y seguridad.
En los videos grabados desde drones, el puente caído se observa como una cicatriz gris entre las montañas verdes de Shuangjiangkou. Los restos de hormigón y acero quedaron esparcidos sobre el río, testigos silenciosos del poder del agua y la fragilidad humana frente a la naturaleza.