Flores secas: técnicas para secarlas en casa, especies ideales y formas originales de usarlas para decorar
Prácticas, ecológicas y decorativas: las flores secas son tendencia. Descubrí los métodos para secarlas, las variedades que más se lucen y las mejores ideas para aprovecharlas.
Si te enamora la delicadeza efímera de las flores pero no te gusta ver cómo se marchitan, las flores secas son tu mejor recurso decorativo. Transformar ramos en versiones “eternas” es una maravilla: cero cuidados, mucha personalidad y mil posibilidades para lucirlas en casa.
Te contamos las técnicas para secarlas, qué flores funcionan mejor y las maneras más creativas de lucirlas en tu casa.
Técnicas para secar flores
Hay que saber que no todas se secan igual. El truco está en elegir la técnica adecuada para cada una. Las maneras posibles son:
Secado al aire (colgando boca abajo): Agrupar tallos (unos 8–12), sacar las hojas que sobren y atarles la base con goma o una cuerda. Colgarlas boca abajo en un lugar seco, ventilado y oscuro durante 2 a 4 semanas. Este método funciona genial con lavanda, eucalipto, rosas y paniculata o velo de novia.
Prensado: ideal para flores planas o delicadas como margaritas, violetas o flores chicas. Hay que ponelas entre papel absorbente dentro de un libro pesado y dejarlas reposar ahí un par de semanas.
Gel de sílice: conserva mejor los colores y formas, ideal para hortensias o peonías. Se debe cubrir la flor con el gel y esperar unos días.
Microondas - horno suave: para los más impacientes. Se pueden secar en horno bajito (unos 50 °C) o con gel de sílice en microondas durante unos minutos. No es apto para todas las flores, pero sirve para proyectos rápidos.
Sea cual sea el método, el ambiente es muy importante. Debe haber poca humedad, buena ventilación y luz indirecta, ya que el sol directo suele decolorar los pétalos.
Las flores secas casi no requieren mantenimiento, pero es conveniente cuidarlas un poco para que duren más. Si alguna flor se empieza a desmoronar, se puede rociar con un poquito de laca para el pelo, esto ayuda a fijar pétalos y ramitas. También es importante evitar ambientes húmedos para que no salga moho.
Flores ideales para secar
Lavanda: clásico absoluto. Mantiene aroma y color con el secado al aire en 2–3 semanas.
Eucalipto: sus hojas verdes se conservan bárbaro y quedan bien en arreglos minimalistas o solas en un jarrón.
Rosas: románticas, con un aire vintage al oscurecerse en el secado. Lo ideal es cortarlas cuando todavía no abrieron del todo.
Hortensias: sus cabezas florales grandes siguen siendo voluminosas después de secas, perfectas para jarrones o mezcladas con otras especies.
Paniculata (velo de novia o nube): liviana, delicada y etérea, muy usada en coronas y ramos de boda.
Siemprevivas: flores “de papel” que soportan el paso del tiempo como campeonas. Mantienen color y forma.
Cardos, trigo, avena y espigas: aportan un toque rústico y bohemio, con textura y altura.
Ideas originales para usarlas en tu casa o reunión
Algunas maneras de lucir tu colección floral:
Jarrones y centros de mesa: la forma clásica. Jugá con distintas alturas y texturas para que no quede plano.
Coronas y guirnaldas: perfectas para puertas, ventanas o paredes. La paniculata, la lavanda y el eucalipto se lucen un montón en este formato.
Cuadros con flores prensadas: ideales para quienes usan la técnica del prensado. Enmarcá las flores y vas a tener un resultado bohemio y vintage.
Velas decoradas: podés incrustar pequeñas flores secas en la superficie de una vela grande para un detalle delicado.
Arreglos colgantes: estructuras con ramos invertidos, aros con ramitas secas o móviles florales dan un efecto encantador en cualquier rincón.
Mix de texturas: sumá ramas de eucalipto, espigas de trigo o avena y flores pequeñas para darle volumen y contraste.
Decoración de mesas en eventos: un ramito de lavanda o paniculata sobre cada servilleta suma un toque rústico y simple.
Frascos y botellas decorativas: flores secas dentro de recipientes de vidrio transparente se convierten en adornos fáciles y originales.
Con estas técnicas, flores aliadas y un poco de creatividad, vas a poder inmortalizar la belleza de las flores y llenar tu casa de color. Una forma simple y ecológica de disfrutar de la naturaleza todo el año.