5 cosas que no sabías del solsticio de junio

Es cierto que la órbita de la Tierra no es un círculo perfecto. Es un poco alargada, por lo que durante una parte del año la Tierra está más cerca del Sol que en otras épocas. Sin embargo, en el hemisferio norte, el invierno ocurre cuando la Tierra está más cerca del Sol y el verano cuando está más lejos. Entonces tiene que haber otra explicación para esto.

No te preocupes, a continuación te contamos por qué tenemos estaciones en el año y otras curiosidades del solsticio para celebrar la llegada del invierno.

1- Hay estaciones porque el eje del planeta está inclinado

En algún momento de la historia terrestre, algo muy grande golpeó a la joven Tierra y le hizo perder el equilibrio. Entonces, en lugar de girar con su eje perpendicular a su plano orbital, está inclinado 23,45 grados desde la perpendicular. Esta inclinación hace que los lugares del planeta que reciben la mayor cantidad de energía del Sol vaya cambiando durante el año. Por ejemplo, en diciembre, los rayos del Sol llegan más directo al norte de Argentina, que es cuando comienza nuestro verano.

En diciembre es verano en el hemisferio sur porque los rayos del Sol inciden en esa parte de la Tierra más directamente que en cualquier otro punto de la órbita terrestre, o, en otras palabras, más directamente que en cualquier otra época del año. Es invierno en junio en el hemisferio sur, porque es entonces cuando le toca al Polo Norte inclinarse hacia el Sol.

2- Muchos países no tienen 4 estaciones al año

El verano, otoño, invierno y primavera es una convención popular de las zonas templadas y polares del mundo debido a que tienen grandes contrastes de temperatura a lo largo del año. Pero en las zonas intertropicales (entre los trópicos de cáncer y capricornio) estos cambios son poco apreciables. Las temperaturas son parejas todo el año, el sol casi no cambia su trayectoria, y los días y noches duran 12 horas todo el año. Pero existe otra variable meteorológica que sí cambia en el año: la lluvia.

En las zonas tropicales, en cambio, se observa una época donde abundan las precipitaciones y otra en la que los días son más secos. Por este motivo, sólo se reconocen dos estaciones al año: la seca y la lluviosa.

3- El Sol se detiene

Al menos desde nuestro punto de vista. Solsticio proviene de las palabras latinas sol , que hace referencia al astro y sistere , que significa detenerse o quedarse quieto. En el día del solsticio de junio, el Sol alcanza su posición más septentrional, visto desde la Tierra.

En ese momento, su cenit no se mueve hacia el norte o el sur, como ocurre durante la mayoría de los otros días del año, sino que se detiene en el Trópico de Cáncer. Unos días después invierte su dirección y comienza a moverse hacia el sur nuevamente.

4- Comienza a llegar más radiación, pero las temperaturas siguen en descenso

A partir del solsticio de invierno, los días comienzan a alargarse. Pero a diferencia de lo que la lógica nos dice, las temperaturas continúan en descenso. Esto se debe a que el aire no se calienta con la radiación del Sol, sino con el contacto del suelo caliente. Así que para que empiece a aumentar la temperatura del aire, primero se debe calentar el suelo, y esto lleva su tiempo: aproximadamente un mes. Así que hasta agosto, las temperaturas no harán más que descender.

5- En el Círculo Polar Antártico no amanece

Tener el eje terrestre inclinado tiene otra consecuencia: que algunas partes de Antártida no tengan día. El solsticio de junio es el único momento del año en el que es de noche simultáneamente en todo el Círculo Polar Antártico, que está delimitado por el paralelo 66° 34´.