Las lluvias demoraron el inicio de la cosecha de soja, pero otra oleaginosa sorprende por sus rendimientos

Marzo dejó un balance de excesos hídricos y complicaciones para la cosecha de soja y maíz. En tanto, el girasol sorprende en Argentina y alcanza rendimientos récord, elevando la proyección de producción.

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Mientras la “falta de piso” demora el inicio de la cosecha de soja de primera. Mas del 50 % de la soja de segunda se encuentra bajo óptimas condiciones. (Gentileza: @GuilleDivito en la red social X)

El mes de marzo concluyó con un balance pluvial notablemente positivo para la región pampeana, siguiendo la tendencia iniciada en febrero. Durante ese mes, la mayor parte de la región experimentó lluvias por encima de los valores medios estadísticos históricos, lo que provocó acumulaciones de agua atípicas en ciertas áreas.

Si bien las precipitaciones fueron necesarias para corregir los efectos de la sequía que afectó la región durante los primeros meses del año, también trajeron problemas de excesos hídricos, complicando la cosecha de varios cultivos.

El último reporte de la Bolsa de Comercio de Rosario indicó que los sectores del centro oeste y sur de Buenos Aires, la cuenca del Salado, gran parte de La Pampa, el centro este de Córdoba y el sur de Santa Fe se vieron afectados por estos excesos de humedad. En estas áreas, las lluvias dejaron su huella en el terreno, complicando la recolección de los cultivos de soja y maíz, especialmente en lo que respecta a los primeros lotes de soja de primera, que apenas alcanzaron el 2 % de cosecha.

En cuanto a las perspectivas de rendimientos y proyecciones de cosecha, los números indican que la campaña se ubicaría dentro de los parámetros lógicos de un año con dificultades. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires mantiene su proyección de produccion en 48,6 millones de toneladas y en el caso del maíz la entidad rosarina estimó la cosecha del cereal en 44,5 millones de toneladas.

De extremos climáticos a pensar en la próxima campaña

Uno de los casos más extremos que se vivió en marzo fue el de la provincia de Chaco. Después de varios meses de sequía, en solo diez días, esta provincia acumuló más de 250 mm de lluvia, con un pico de 348 mm en Las Breñas, un dato que triplica el valor medio estadístico de lluvias del mes. Estos registros fueron una bendición para las reservas hídricas, que mejoraron considerablemente, pero el exceso de agua llegó en un momento poco favorable.

A pesar de estos excesos, las precipitaciones de febrero y marzo ayudaron a recuperar los perfiles de humedad en toda la región pampeana, lo que mejoró las reservas de agua en el suelo y establece una base sólida para la futura campaña invernal de granos finos. Estos eventos fueron cruciales para corregir la sequía que afectó a la región durante los primeros meses del año, especialmente en las zonas productoras de trigo y cebada.

Sin piso no se pudo ingresar a los lotes

La cosecha de soja de primera en la región núcleo avanza de forma lenta debido a las complicadas condiciones de humedad en el suelo. Apenas iniciada la recolección de soja, los primeros lotes cosechados están mostrando rindes bajos, que no superan los 40 qq/ha.

Aunque el comienzo de la cosecha es lento y con rendimientos no tan altos, se espera que los lotes restantes muestren mejores resultados a medida que avanza la cosecha. La soja de segunda, por su parte, parece haber tenido una recuperación más exitosa de la sequía y los rendimientos en estas zonas podrían superar los 30 qq/ha.

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Lote de maíz tardío en grano lechoso, sembrado en Gorchs, provincia de Buenos Aires. (Gentileza Bolsa de Cereales de Buenos Aires)

La cosecha de maíz temprano, por su parte, muestra un panorama algo más alentador, alcanzando un 80 % de avance en la recolección. Sin embargo, los rendimientos siguen siendo muy dispares según la región.

La tormenta del 27 de marzo dejó como saldo la pérdida de unos 60.000 ha de cultivos en las áreas más afectadas, lo que agrava aún más las dificultades para los productores que ya enfrentaban un clima impredecible.

Las previsiones para los próximos días incluyen un cambio en las condiciones climáticas con descenso de las temperaturas, que podría tener un impacto negativo en los cultivos de soja de segunda y maíz tardío, ya que aún están en etapas críticas de llenado de grano. Si se producen heladas importantes, los rendimientos de estos cultivos podrían verse reducidos significativamente, como ocurrió en la campaña 2021/22, cuando las heladas de principios de abril redujeron drásticamente los rendimientos de soja de segunda en muchas áreas productivas.

Un cultivo sorprendió por sus altos rendimientos

La cosecha de girasol en Argentina durante la campaña 2024/2025 superó todas las expectativas, alcanzando rendimientos históricos que elevan la proyección de producción a 4,5 millones de toneladas. Este logro se atribuye a condiciones climáticas favorables y a prácticas agrícolas eficientes implementadas por los productores.

Según confirmó la Bolsa de Cereales de Buenos Aires en su Panorama Agrícola Semanal, en provincias clave como Córdoba, Entre Ríos y la Pampa Húmeda, los rendimientos fueron notablemente superiores al promedio histórico. De esta manera, la campaña de girasol se perfila como una de las más exitosas en la historia reciente de Argentina.