Un fin de semana pasado por agua en el AMBA: lluvias persistentes y temperaturas fuera de estación. ¿Cuándo mejora?
El último fin de semana de noviembre llegó con un combo intenso: lluvias continuas, viento del sudeste y marcas térmicas dignas de otoño. El AMBA atraviesa dos días inestables que incluyen anegamientos costeros, acumulados importantes y una semana un poco más alentadora.

El fin de semana arrancó complicado en toda la franja central del país, y el Área Metropolitana lo sintió desde temprano. El sábado empezó con un cielo gris y compacto, una humedad que hacía pegarse la ropa y un viento del sudeste que no solo metía frío: también empujó el río de la Plata hacia niveles elevados. Ese movimiento terminó con varios sectores costeros de Tigre bajo el agua durante la madrugada.
El panorama no mejoró demasiado con el correr de las horas. Las lluvias se activaron cerca del mediodía y, aunque alternaron entre moderadas y más intensas, nunca abandonaron la escena. Para las tres de la tarde, algunas zonas del norte del conurbano ya acumulaban más de 35 milímetros, un registro considerable para la época.
El viento sur y sudeste reforzó el ambiente fresco y bien húmedo: las temperaturas de la tarde quedaron clavadas en 16 o 17 grados, valores que cualquier calendario discutiría para finales de noviembre. Y lo que queda del día no promete grandes cambios.
Para lo que resta del sábado, no se esperan cambios significativos. Las lluvias y algunas tormentas continuarán afectando al AMBA, las temperaturas seguirán bajas y se sumarán nuevos milímetros a un día ya muy húmedo.
Un domingo y lunes que mantiene la inestabilidad
El domingo presentará un escenario similar. Podía asomarse una mejora temporaria durante la madrugada, algo así como un respiro breve. Pero desde la mañana, las lluvias y las tormentas volverán a ganar terreno. El viento del este y la humedad también harán su aporte para mantener todo fresco: será otro día con poca amplitud térmica y condiciones inestables persistentes.
En definitiva, este fin de semana deja una sensación clara: es un fin de semana ideal para quedarse en casa, acumular películas y acompañarlas con algo rico para comer y sin culpas. Afuera, mientras tanto, la inestabilidad seguirá sumando milímetros.
El inicio de la semana laboral mostrará una mejora progresiva. Sin embargo, durante la mañana todavía se prevén chaparrones y algunas tormentas intermitentes, aunque cada vez más aisladas.
La mejora concreta llegará por la tarde, cuando disminuya la nubosidad y aparezcan los primeros períodos de sol. Si eso ocurre, el ascenso térmico será más notorio, aunque la humedad residual podría limitarlo.
Desde el martes, vuelve el buen tiempo y suben las temperaturas
A partir del martes, el escenario cambia por completo. Se abre una ventana de varios días relativamente estables, con cielo más despejado, pocas nubes y un ambiente que empieza a entibiarse.
El ascenso térmico será paulatino, pero sostenido. Para el miércoles, las máximas en el AMBA volverán a rozar los 30 grados, y desde el jueves el calor tomará el protagonismo otra vez. Un giro abrupto después de dos días que parecieron sacados de otro mes.