Extensa ola de calor afectó a gran parte de Groenlandia

En las últimas semanas, una intensa y extensa ola de calor ha afectado a Groenlandia con temperaturas que en algunos sectores superaron los 15 °C e hicieron posible estar en manga corta en zonas muy frías. Según señaló Copernicus, el programa de observación de la Tierra de la Unión Europea, las altas temperaturas prolongadas han desencadenado un rápido derretimiento de la capa de hielo, liberando unos 6.000 millones de toneladas de agua al día en el océano entre el 15 y el 17 de julio de 2022.

Según consignó CNN en Español, la cantidad de hielo que se derritió en esos días representa el volumen de agua de 7,2 millones de piscinas olímpicas. El agua frente a la costa del noroeste de Groenlandia se ha mantenido en calma, pero los charcos que se acumulan en los icebergs de la región son una señal de que se está produciendo una transformación más arriba en la capa de hielo.

El rápido derretimiento de hielo se hizo visible por los ríos de agua de deshielo que se precipitan hacia el océano. Las temperaturas han rodado los 15,6 °C, 10 grados más cálidas de lo normal para esta época del año.

Un fenómeno que parece irreversible

En diálogo con CNN, Ted Scambos, científico investigador sénior del Centro Nacional de Datos de Nieve y Hielo de la Universidad de Colorado indicó que "el derretimiento del norte la semana pasada no es normal, considerando los promedios climáticos de 30 a 40 años. Pero el derretimiento ha ido en aumento, y este evento fue un pico en el derretimiento".

Cada verano la comunidad científica se ve preocupada con que se repita el derretimiento récord que ocurrió en 2019, cuando 532.000 millones de toneladas de hielo fluyeron hacia el mar. Una fuente termal inesperada y una ola de calor en julio de ese año provocaron que casi toda la superficie de la capa de hielo se derritiera. Como resultado, el nivel global del mar aumentó permanentemente en 1,5 milímetros.

Un dato importante para comprender la magnitud del problema, es que solo Groenlandia tiene suficiente hielo, que si se derritiera, elevaría el nivel del mar en 7,5 metros en todo el mundo. En febrero, un estudio publicado señalaba que se han observado tasas de derretimiento sin precedentes en la parte inferior de la capa de hielo de Groenlandia, causado por enormes cantidades de agua de deshielo que se filtra desde la superficie. Esta agua es particularmente preocupante porque puede desestabilizar la capa que se encuentra sobre ella y podría provocar una pérdida masiva y rápida de hielo.

Problemas para los investigadores

En 2020, los científicos descubrieron que la capa de hielo de Groenlandia se había derretido más allá del punto de no retorno. Eso significa que ningún esfuerzo para evitar el calentamiento global puede evitar que eventualmente se desintegre ya que ha ido perdiendo estabilidad. De esa investigación participaron científicos de la Universidad Estatal de Ohio. La tasa de derretimiento en los últimos años supera todo lo que Groenlandia ha experimentado en los últimos 12.000 años, encontró otro estudio, y es suficiente para causar un cambio medible en el campo gravitacional sobre Groenlandia.

Algo paradójico es que el trabajo de los científicos para comprender el impacto del cambio climático se ve frustrado por el propio cambio climático, especialmente en el campamento de investigación East Greenland Ice-core Project, o EastGRIP, en el noroeste de Groenlandia. Allí se ha tratado de conseguir vuelos al campamento para poder enviar los núcleos de hielo que han recolectado recientemente, pero el calor está desestabilizando el lugar de aterrizaje elegido sobre el hielo del lugar.

Las temperaturas reportadas son demasiado elevadas puedan aterrizar los aviones equipados con esquís. Para evitar perder las muestras, se almacenaron los núcleos de hielo en grandes cuevas artificiales que se han hecho en la nieve para protegerla del calor del verano.