OMM da a conocer el estado del clima en América Latina y el Caribe 2021

Este viernes 22 de julio, la Organización Meteorológica Mundial dio a conocer un nuevo informe del "Estado del clima en América Latina y el Caribe". ¿Cuáles son las novedades con respecto al cambio climático en estas regiones?

niño y sequía
Vivimos expuestos a cambios cada vez más severos del clima. América Latina y el Caribe forman parte de las regiones más vulnerables del planeta.

En 2021 continuó la tendencia al aumento de la temperatura global, año que se situó entre el quinto y el séptimo más cálido desde que se tienen registros —informa la Organización Meteorológica Mundial (OMM)—, y hace énfasis en la situación de América Latina y el Caribe, que experimentó una tendencia análoga.

A esto se suma que 2021 fue el séptimo año consecutivo en el que se formó una tormenta tropical antes del inicio de temporada de huracanes en el Atlántico, siendo esta la tercera más activa jamás registrada, con 21 tormentas con nombre.

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Además, otro efecto adverso a mencionar es la inseguridad alimentaria aguda que se vivió en América Central el pasado año, producto al impacto de dos huracanes (Eta e Iota) y a las repercusiones de la pandemia COVID-19 en la economía, según explica la OMM. En general, la región de América Latina y el Caribe se enfrenta, y seguirá enfrentándose, a graves crisis socioeconómicas inducidas por fenómenos hidrometeorológicos extremos, repercusiones de la pandemia y por consecuencia de la actual guerra en Ucrania.

El principal objetivo del informe El estado del clima en América Latina y el Caribe 2021, presentado este viernes 22 por la OMM, es el de promover “la consolidación y la ampliación de los sistemas de alerta temprana a través de las predicciones que tienen en cuenta los impactos y las alertas de fenómenos meteorológicos, hidrológicos y climáticos extremos basadas en los riesgos.”

¿Qué revela el nuevo informe?

Lo primero a tener en cuenta es que la tasa promedio del aumento de temperatura en la región fue de 0,2 °C por década entre 1991 y 2021, comparado con el aumento de 0,1 °C por década en el período 1961-1990: aunque parezca una diferencia pequeña, es muy significativa, evidencia el Dr. Wenjian Zhang, Subsecretario General de la OMM. "En 2021, la temperatura media con respecto a la referencia de 1981-2010 fue 0,5 °C más cálida en México, 0,35 °C más cálida en América Central y 0,36 °C más cálida en América del Sur", revela el informe.

aumento temperatura
A pesar de ser inferior con respecto a los últimos años debido a la influencia de un episodio moderado de La Niña, la temperatura siguió aumentando en América Latina y el Caribe. Fuente: OMM.

A diferencia de la distribución homogénea del calentamiento, la precipitación puede variar bastante en una misma región. Y esto ocurre sobre todo en América Latina, que se presentan precipitaciones sobre lo normal en Colombia o en el Amazonas central; sin embargo, en zonas como en la cuenca del Paraná-La Plata o en la mayor parte de Chile, se encuentran bajo lo normal. En efecto, se destaca principalmente la sequía extrema que vive Chile hace 15 años.

América Latina y el Caribe están expuestos a tormentas tropicales y huracanes. Con el aumento de la temperatura, hay más energía y humedad disponibles para estos fenómenos.

Por otro lado, los glaciares de Los Andes han retrocedido durante décadas: estas tasas observadas de pérdida de masa de los glaciares figuran entre las tasas de pérdida de masa regionales más altas a nivel mundial.

También crítico el aumento del nivel del mar, que "amenaza a la gran parte de la población de América Latina y el Caribe que vive en zonas costeras, ya que contamina los acuíferos de agua dulce, erosiona las costas, inunda las zonas bajas y aumenta el riesgo de mareas de tempestad".

¿Qué hacer ante esta crisis?

El informe destaca que "la reducción del riesgo de desastres es fundamental para la justicia climática y el desarrollo resistente al clima". En América Central y América del Sur "se necesitan servicios climáticos, sistemas de alerta temprana de extremo a extremo e inversiones sostenibles" que ayuden a enfrentar los riesgos relativos a eventos extremos como olas de calor o inundaciones.